Frente a las protestas generadas por diversas organizaciones respecto de la puesta en marcha de la usina termoeléctrica de Río Turbio, en la Provincia de Santa Cruz, el intendente de la ciudad solicitó nuestra opinión sobre la validez del estudio de impacto ambiental aportado por la empresa.
Tomamos como encomienda la estricta revisión del estudio de impacto ambiental, y para ello conformamos un equipo técnico que viajó a Río Turbio para obtener datos en terreno.
La revisión del EIA indicó que, más allá de algunas observaciones menores, el trabajo estaba correctamente realizado. Se indicó que debería complementarse con un EIA de las obras necesarias para la ampliación de la producción de la mina que, en las condiciones vigentes al momento de nuestra visita, no estaba en posibilidad de entregar la cantidad de carbón necesaria para asegurar el funcionamiento de la usina.